jueves, 28 de junio de 2012

Las agujas del miedo o el asalto al verso libre*



Las agujas del miedo o el asalto al verso libre

Las Agujas del Miedo lo compone una poesía hecha tizón en la sombra, ruptura de silencios ancestrales, incertidumbre que se aclara en cada poema. Nos permite trajinar a través de una memoria curtida desde el inconciente colectivo, con una territorialidad que se expande desde la ruralidad y lo agreste del campo hasta las explosiones de una ciudad en llamas. El poeta ama, siente y padece desde un silencio milenario. Y la poesía sucede para romper con ese silencio obligado a padecerse en el transcurrir por los laberintos de la existencia .

Neguel Machado, Caracas (1968) llegó a la poesía a través del cultivo de la décima espinela. Oficio que aprendió de su abuela merceita en una experiencia relatada por el autor en su primer libro "La macagua y otros cuentos de merceita". Este poeta caraqueño ciudadano de la parroquia caricuao, nacido y criado en esa simbiosis entre ruralidad y urbanidad, casada entre su barlovento inseparable y la caracas de los velorios de cruz, de los san juanes, de la paradura de niño y del cumbe, de su sabana grande, su callejón la puñalada, su Centro Simón Bolivar y su bohemia.

Por esas cosas de la vida, una noche después de un recital, discutiamos sobre la separación entre poetas y decimistas que el poeta sentía en las grillas de algunos recitales y llegamos a concluir que un poeta verdadero toma la palabra como recurso de expresión y hace ejercicio de ella en las diversas formas. Donde no sólo se limita al verso rimado o a la estrcutura de la décima espinela. El poeta debe hacerse del lenguaje y tomarlo como un medio para expresar todas las sensaciones, sentimientos, percepciones y deseos a los que se tenga cabida y ser capaz de expresarlos a través de distintas formas, ya sea a través de la estructura métrica de la decima, el verso, la copla o a través del verso libre. 
 
Cuando asistimos a "Las agujas del miedo" reconocemos a un poeta que se desprende de la estructura métrica de la décima y desde el verso libre se posesiona de la palabra con distintas miradas: espectador, protagonista, víctima y victimario de la experiencia de vivir, de sentir, de observar. Percibimos como una sombra oscura y nocturna recorre estos versos. Un grito desde un sentimiento acumulado. Un ansia de expresar lo que ha producido ahogo por años. Una necesidad de condenar el temor ante la infamia:

"Calla temor
te condeno al silencio
ya no escucharé tus gritos apagando mi voz
te condeno al alarido de mi protesta
a que escuches la temblorosa voz de mi conciencia
arropada por la ira
jamás volveré a caer en tus tentáculos
lo juro"


Este libro está dividido en cuatro bloques, en A"gujas del miedo", primera sección que también da título al libro, el poeta muestra todo el descontento, el dolor y la impotencia por el conflicto palestino, se hace de la palabra para hacer florecer la esperanza y denuncia todo el aparataje mediático imperialista por hacer de esta guerra una comedia:
"Sólo existió un holocausto y no debe repetirse
Esto no está sucediendo
Es sólo una ilusión de Copperfield o tal vez de Kris Ángel
Todas esas muertes son producto del genio Spielberg
(...)
No sientas el sufrimiento
Total
ellos
son los malos
Recuerda
los de la estrella azul son los héroes
Los otros
los malditos árabes terroristas
Deben ser exterminados"


Y a través de la palabra salva la condición de existir, de expresar las ideas, de no callar, a pesar de la barbarie, de la destrucción, del genocidio y la coloca como arma para sobrevivir y mantenerse

"Insolente aguijón del destierro
vencido por la memoria
no te alzaras victoriosa
no nos despojaras de la alegría
no importa cuanta luz apagues
viviremos esparcidos en la palabra"

En “Con los pobres del mundo” Neguel Machado avanza y muestra su solidaridad y su rabia por el infortunio del Pueblo Haitiano y dibuja el dolor sembrado en los hombres y en la tierra, por los que hacen abuso del poder, para pisotear y hacer miserables a muchos, en favor de una pequeña minoria. Allí tambien dibuja la ciudad que alimenta las esperanzas en su bohemia y la transita buscando espacios para darle libertad a sus ideas:

"Esta ciudad de raza cósmica que fue azolada por piratas y
caudillos tiene la libertad por herencia"
En “Aviso de existencia” el poeta da fé de vida a toda la expresión, que lo conforma y se permite buscar hacerse escuchar ante su prójimo, su ser amado, su hermano, su otro yo, a través de expresiones afectivas, de pasión, de súplica y de duelo, invitando al lector a estar atento a toda revelación de la existencia:

"Levántate y acaricia tus temores
toma el café con tus tristezas y baila con ellas
(...)
Cuando la sombra parece engullirme y perder
improviso el río que ha de volverme al cauce"

Con el sol a medio cielo” marca el rumbo a seguir en esa batalla diaria para no abanadonar el compromiso con la gente. Reafirma su apego a las ideas revolucionarias y a su compromiso social desde la escritura:

"Me aventuro al mundo como trueno jubiloso
como el poeta eterno y fuerte
ansioso
solitario"


Las agujas del Miedo nos presenta a un poeta renovado en sus formas expresivas, que a través del verso libre logra expresar, quizá con mayor soltura, todo lo que curte su existencia, que reinterpreta en cada verso la realidad que le toca vivir y contemplar y que se activa desde el lenguaje para dar rienda suelta a todo lo que le sorprende.

El poeta lográ generar una atmósfera en la escritura que nos deja a la expectativa de mayores expresiónes y queremos que sea mas extenso su discurso poético. Es allí cuando cumple su cometido por que remueve en nosotros percepciones a las que no siempre atendemos y nos obliga a mirar de cerca cada uno de los escenarios que representa en sus imágenes y a buscarlos entre nosotros.


José Javier Sánchez

Caracas, 3 de diciembre de 2010

* Prólogo del Libro Las agujas del Miedo" 
de Neguel Machado. 
Publicado por la editorial "La Espada Rota" (2012)


lunes, 25 de junio de 2012

Los poetas no escribimos sólo de amor

José Javier Sánchez: Los poetas no escribimos sólo de amor
Caracas, 14 Jun. AVN.- Con verbo relajado, José Javier Sánchez se define como un poeta soñador que cree en la fuerza de la palabra como método para la transformación de la realidad y del imaginario, en beneficio de la unión, el afecto y la solidaridad.
A cuestas lleva una larga historia marcada por la influencia literaria que fue alimentando mientras leía la gran colección de obras que atesoraba su tío Alí Sánchez, en la amplia biblioteca de la casa que compartía con familia.
Actualmente, a sus 41 años de edad, con una destacada carrera literaria encima, se sitúa en la acera crítica y afirma con propiedad que la vocación de sus colegas no se basa simplemente en escribirle al amor.
"Ese lugar común de que el poeta solo escribe sobre el amor es falso. Sí hay que reconocer que se hace en algún momento, pero solo es una etapa. Una cosa es apelar a los poemas para seducir, otra es pasarse la vida en eso porque ya se caería en la cursilería", comenta.
En ese contexto deja claro que la poesía venezolana está rompiendo los moldes, y que esa labor la llevan a cabo los más jóvenes, quienes a su juicio están abriendo las brechas para la consolidación de las nuevas generaciones de la poesía nacional.
Las convicciones que hoy defiende José Javier no surgen de la nada, pues con tan solo 12 años debido a su afición por la lectura fundó una pequeña biblioteca comunal  ayudado por los curas Benedictinos de su barrio de crianza llamado Las Torres, ubicado en la parroquia La Pastora, en Caracas.
"Cuando mi tío Alí se casó se llevó su colección de libros de la casa, a los meses también mudaron la biblioteca de San José del Ávila, que era la que me quedaba más cerca. Entonces me di cuenta que no tenía nada que leer y que necesitaba un lugar. Así surgió la biblioteca comunal", relató entre risas.
Poeta de pura cepa
Su pasión literaria arrancó con la poesía clásica común caracterizada por la composición de versos en rimas, siendo la Cruz de Mayo su primera musa, mientras se desarrollaba como cultor de festividades tradicionales populares.
"La poesía clásica siempre me pareció predecible, esa estructura se convirtió en una rutina y sentí la necesidad de fracturar la métrica de la poesía y me acerqué a los versos libres componiéndolos sin rimas. Después entendí que también podía expresarme por medio de la tradición, la problemática social, los verdaderos sentimientos y los sueños frustrados".
Con esa nueva visión literaria José Javier llegó a los grupos poéticos impulsados por los militantes izquierdistas que se congregaban en la Universidad Central de Venezuela (UCV), a mediados de los años 80; allí se relacionó con diferentes personalidades de las letras, que como él se abrían espacios dentro de los círculos intelectuales de la época.
Finalmente se graduó como educador en la Universidad Simón Rodríguez, después de haber intentado infructuosamente cursar estudios de Trabajo Social en el Colegio Universitario de Caracas y Letras en la UCV.
Su vida entre poemas, versos y enseñanzas también se ha visto influenciada por la presencia de su única hija, Gabriela, de 14 años, a quien el mismo define como la esencia que mueve su mundo.
"Ella me permitió la posibilidad de verme como una persona responsable, una persona capaz de realizar un proyecto consecuente. Con ella rompí la visión del padre dictador para convertirme en su compañero y su amigo para que entienda que está construyendo una vida junto sus padres  y que es corresponsable en todos nuestros proyectos", expresó.
Desde el lunes 19 de junio José Javier se enfocará en su participación dentro de las actividades del Festival Internacional de Poesía que se realizará en varios puntos de Caracas, donde tendrá la oportunidad de recitar parte de sus obras, entre las que se encuentran: Fragmentos para una memoria (2007), Antología de decimistas caraqueños (2008), Hasta que el recuerdo lo permita (2009) y Código Postal 1010 (2010).
"Estas actividades son espacios para el encuentro y la integración en función de la palabra, para la construcción de un mundo mejor. La posibilidad de que nos reunamos gente de diversas partes del mundo significa que muchos de los presentes quieren dejar un mensaje de transformación".
Dentro de las actividades profesionales también destaca su labor como educador de la Agencia Literaria Venezolana, perteneciente al Centro Nacional del Libro (Cenal), así como su rol de tallerista poético en los encuentros que realiza todos los lunes, desde las 5:00 de la tarde, en la sede de Librerías del Sur, ubicada en el Teatro Teresa Carreño.
Paralelamente se alista para su participación en el Festival Internacional de Poesía de Medellín que se llevará a cabo a finales del mes de junio. En el evento formará parte de la representación de la poesía venezolana.
"Para lidiar con todo este mundo y ser un gran poeta hay que cargarse de muchas cosas, hay que investigar, intercambiar opiniones. Ese es el trabajo que debe hacerse, eso sí, sin olvidarse de la calle, de la gente. Cuando se hace así fluye de manera natural", agrega.
Christian Gutiérrez AVN 14/06/2012 11:11

miércoles, 13 de junio de 2012

Amanecieron de Bala



Amanecieron de Bala*

Y como generación no podemos dejarnos etiquetar de boba, de ingenua, de apolítica, de a crítica o pasiva. Somos un movimiento que vibra impulsando la pasión que desborda las calles, los teatros, las universidades, los liceos, las escuelas de música, los talleres mecánicos, las galerías, los cines, los cafés, los pequeños bares, las ferias de libros, las bienales, los recitales underground, la academia, el caserío, la playa, el barrio y la calle.
La represión a los movimientos sociales y culturales se desplazó a otros territorios, perdió espacios dentro del pueblo, por que los fusiles cambiaron de dirección, y los perros de guerra han generado otros mercados y buscan otras víctimas y por eso pretenden generar un caos en los barrios y alimentar una violencia que produzca delincuentes y muertes absurdas. Por que ya no se reprimen protestas estudiantiles contra el alza del pasaje, y se ha profundizado la atención primaria y hay médicos en cada barrio, que controlan un dolor de cabeza, una hipertensión, una miopía, una virosis. La gente puede graduarse de bachiller y hacer una carrera si lo desea y el analfabetismo como fenómeno estadístico ha desaparecido
La poesía fluye entre nosotros como manifestación del ser y del no ser, como intersticio de conciencia y acción. Ella es el espacio que creemos vacío, ella tiene todas las pausas y el grito desenfrenado, descarnado. Ella reconstruye un país, una nación, una habitación. Es sentimiento que germina y se hace voz compuesta, convulsa, que dibuja y describe, que dramatiza y canta, que llora y celebra, con todas las imágenes posibles: una mecedora, un revolver, un zancudo, una mariposa, aguas negras o el mar, una nevera rodando, una chatarra, la herencia milenaria, el sexo apresurado, el desamor, la rabia
Toda la juventud posible se reúne en estas voces, y decimos presente activamente en diversos recitales y hacemos poesía para revelarnos contra el academicismo rígido y lo correctamente formal. Se lee en todos los espacios posibles, cada vez somos más, cada vez más poemas, más libros, más imágenes. Amanecieron de bala, fracturó una represa poética que ahora se desborda por todo el país y canta, y celebra que somos tierra de lectores, de libros, de cine, de música, de teatro, que leemos al país y nos leemos en él, convencidos de que no hay vuelta atrás, no hay mordaza, ni silencio forzado.
Que desde la palabra contribuimos a construir un mundo mejor, a reinventarlo, a replanteárnoslo. Por eso, que viva la Poesía, por eso, que vivan los recitales, y el vino, y la guitarra, y el compromiso, y la reunión política, y la lucha, y comerse un helado, y criar a los hijos, y enamorarse, y graduarse y pintar y seguir trabajando y por eso también que no muera el sueño, por que está amaneciendo y la mañana promete resplandores.
Amanecieron de Bala, es una antología realizada por Yanuva León, Dannybal Reyes y Ricardo Zerpa, tres jóvenes poetas, editores, correctores y antólogos que apostaron mostrar voces representativas de una generación nacida entre 1970 y 1985, conscientes de que en ella, como en toda antología, existen algunas ausencias, pero apostando a presentar un panorama de la joven poesía de ese momento, y llevar a los lectores a realizar una lectura de país desde la mirada de sus voces jóvenes contemporáneas presenta las voces de los poetas:  Alejandro Silva, Carlos Duque, Coral Pérez, Daniela Saidman, Dannybal Reyes Umbría, Diego Sequera, Edmundo Ramos, Eduardo Mariño, Eduardo Viloria Daboín, Elías Yanez, Ever Delgado, Francisco Ardiles, Freddy Ñañez, Héctor Carrasquero, Inti Clark, Joanna Cadenas, Joel Rojas Carrillo, José Javier Sánchez, José Miguel Casado, Julio César Borromé, Karelyn Buenaño, Kattia Piñango, Luis Ángel Barreto, Luis Enrique Belmonte, Luis Ernesto Gómez, Luis Manuel Pimentel, Lyerka Bonanno, María Alejandra Rojas, Ramón Alirio Contreras, Ricardo Romero Romero, Ricardo Zerpa Salazar, Rodolfo Quintero-Noguera, Simón Zambrano, Víctor Manuel Pinto, Yanuva León y Yuri Patiño, convencida de que queda camino por recorrer.
Amanecieron de Bala, es una antología que sigue creciendo en el imaginario, por que su esencia responde más a un momento que a un grupo, más a una generación que a una élite, más a un universo que a un círculo, a un “Maravilloso País en Movimiento

* Publicado por Fundación Editorial el perro y la rana. Año 2007